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sábado, 14 de abril de 2012

Cuidemos a Nuria:
Te has preguntado si seria victima de un atentado ¿?
April 12, 2012 Admin031 No comments Share

Hay que preservar, a toda costa, la vigencia de los derechos que todos tenemos para criticar y opinar sobre los asuntos públicos, gústenos o no. Sobre todo cuando hay Nurias valientes que se atreven a ejercer esos derechos…Los Buenos Días de Molina Morillo No pocas personas me han expresado sus temores de que Nuria Piera sea víctima de un atentado por atreverse a mostrar, en su programa de televisión, lo que considera como evidencias sobre actos de corrupción administrativa que ella, fiel a su rol de periodista investigadora, expone sin tapujos al público.No pretendo que todo lo que diga Nuria sea aceptado porque sí, como palabra de Dios. El objeto de este comentario no es ni rechazar ni apoyar las denuncias del “terror de los corruptos”, como la bautizaron en un foro celebrado en Costa Rica recientemente, en el cual coincidimos ella y yo como panelistas. Pero si bien es cierto que no todos tenemos que estar de acuerdo con sus afirmaciones, no es menos verdad que ella merece respeto y protección para garantizar su seguridad personal. El propio Gobierno debería brindarle esa protección, no vaya a ser que algún fanático o sicario de los que hay ahora a dos por chele en nuestra sociedad, intente un insensato desvarío.Hay que preservar, a toda costa, la vigencia de los derechos que todos tenemos para criticar y opinar sobre los asuntos públicos, gústenos o no. Sobre todo cuando hay Nurias valientes que se atreven a ejercer esos derechos, a sabiendas de que con ello incurren en graves riesgos.Cuidemos, pues, a Nuria.

Manifiesto sobre el 1J4, Manolo y la sublevación de 1963

Manifiesto sobre el 1J4, Manolo y la sublevación de 1963

En declaraciones al diario HOY el 22 de marzo, y el 9 de abril, 2012, el historiador italiano Piero Gleijeses, incurre en mentiras, omisiones y yerros ofensivos a la elevada dimensión de Manolo Tavárez, a la Agrupación Política 14 de Junio y a una pléyade de históricos dirigentes catorcistas.

Primero, expresamos indignación ante las acusaciones vertidas en dos publicaciones por Gleijeses sobre Fidelio Despradel, un digno luchador de décadas, que, como muchos revolucionarios, ha mantenido a lo largo de su vida la bandera verde y negro como estandarte de lucha y decoro personal.
Gleijeses omite en sus declaraciones la sabia conducción de Manolo Tavárez ante las maniobras de un grupo de Unión Cívica Nacional enraizado en el 1J4. Las contradicciones con ese grupo nocivo no eran personales, sino político-ideológicas. La misión y mentalidad de Moncho Imbert, los Baquero y otros, no era de simple malquerencia. Su plan era secuestrar la dirección del 1J4 y torcer su trayectoria según sus intereses y planes afines con Unión Cívica. Cuando no pudieron, abortaron con el natimuerto “Partido 14 de Junio Auténtico”. Su expulsión aparece fundamentada en el comunicado encabezado por Manolo (El Caribe, 2 de diciembre de 1962).
Sumado a esa inexcusable omisión, Gleijeses dice que la idea del grupo que apoyaba a Manolo era “provocar una guerrilla para impedir las elecciones” (de 1962). Esta afirmación es totalmente falsa, sin fuente que la avale.
Sobre la actitud la Dirección del 14 de Junio frente al Triunvirato, Gleijeses se canta y se llora. Afirma:“Era correcta la posición de ese grupo cuando decía que no había condiciones para la democracia cuando el poder estaba en manos de las Fuerzas Armadas”.
Sin condiciones para la democracia, ¿era correcto doblegarse ante el Triunvirato en manos de las Fuerzas Armadas?
Los abajo firmantes participamos en los seis frentes armados abiertos el 28 de noviembre de 1963 en respuesta al golpe a Juan Bosch. Otros tratamos militarmente con Manolo apoyamos con acciones la insurrección, y más tarde actuamos como oficiales constitucionalistasSiendo coherentes durante medio siglo, los suscritos mantenemos la misma actitud ante la insurrección armada de 1963. En este caso preferimos citar al profesor Jesús de la Rosa cuando dice:
“El 14 de junio de 1963, en una manifestación política convocada por la agrupación que Iideraba frente al Baluarte del Conde, Manuel Aurelio Tavárez Justo proclamó:

“Óiganlo bien señores de la reacción, si imposibilitan la lucha pacífica del pueblo, el 14 de junio sabe muy bien dónde están las escarpadas montañas de Quisqueya, y a ellas iremos, siguiendo su ejemplo para realizar la obra de los héroes de junio del 59, y en ellas mantendremos encendida la antorcha de la libertad. Después de haber dicho lo que dijo, el líder catorcista no necesitaba que nadie lo chantajeara para reaccionar como reaccionó frente al golpe de Estado contra el Gobierno Constitucional del presidente Juan Bosch.”
Esa proclama de Manolo fue una respuesta de dignidad ante la trama golpista militar programada para cercenar la Constitución y arrebatar al pueblo, mediante el Triunvirato, los más elementales derechos. Es la Declaración Universal de los Derechos Humanos que contempla la resistencia armada ante la imposibilidad de la lucha pacífica. Con su discurso-manifiesto, Manolo se apoyó en el ejemplo del pueblo “para realizar la obra de los héroes de junio del 59”. Eso engrandece a Manolo a una estatura incompatible con un pelele y enano mental, idea subyacente en las dos declaraciones de Piero Gleigeses al diario HOY.
Jesús de la Rosa afirma: “Después de haber dicho lo que dijo, el líder catorcista no necesitaba que nadie lo chantajeara para reaccionar como reaccionó frente al golpe de Estado contra el Gobierno Constitucional del presidente Juan Bosch.”Nosotros agregamos el apoyo caluroso en los frentes a la decisión política de la sublevación armada. En Santiago por ejemplo, nos juntamos durante cinco días previos el grueso del frente de Las Manaclas y el de Altamira. Estábamos optimistas y conscientes de la misión que emprendíamos. Así lo confirman testimonios escritos, como la carta del héroe y mártir José –Ponono- Minaya. Resulta obvia, pues, la intención de empequeñecer a Manolo.

Sin haber visto a Juan Miguel Román, Gleijeses lo elogia entre los “supersabios”. Mientras esparce culpas, (citando solo a Fidelio Despradel) sobre Polo Rodríguez, Pipe Faxas, Roberto Duvergé y Sóstenes Peña Jáquez. Pronto se cumplirán 50 años de que los firmantes acompañáramos a Manolo en las montañas y en la ciudad, en la insurrección armada. El levantamiento fue un honor ciudadano que nos mantiene la frente en alto contra la ignominia y firmes en la lealtad a Manolo Tavárez, a su trayectoria y a sus ideales.
El alzamiento encabezado por Manolo Tavárez en seis montañas con 29 mártires en 1963 aconteció cuatro años después de las expediciones de la Raza Inmortal en 1959 comandadas por Enrique Jimenes Moya. Y sucedió dos años antes del estallido del 24 de abril de 1965, inspirado y articulado por el coronel Rafael Fernández Domínguez.Como acontece con otras gestas históricas, sobre esas tres jornadas y sus respectivos líderes aparecen escritos con manifestaciones extrañas. Arlette Fernández Vda. Fernández Domínguez ha expresado algo que suscribimos: “Algunos escritores o articulistas desmeritan a los lideres, aun cuando caen, y dicen: se extralimitaron, no supieron esperar, fue una debacle y fue más el daño que hicieron porque fue una locura”.
El 1J4 y Manolo Tavárez ameritan escritos serios y respetuosos de su rol en la historia dominicana. Distorsiones irresponsables, como las de Piero Gleijeses, serán siempre rechazadas por la soberanía de la verdad.

Juan Germán Arias (Chanchano) (Frente de Enrique Jimenes Moya)
Iván Rodríguez (Frente Mauricio Báez)
Raúl Pérez Peña –Bacho- y Anastasio Jimenes (Frente Gregorio Luperón)
Angel Luis Patnella Ceballos y Berto Batista (Frente Francisco del Rosario Sánchez)
Rafael Chaljub Mejía (Frente Hermanas Mirabal)
Bienvenido Aquino Pimentel: Frente Juan de Dios Ventura Simó
Manuel García Germán, Papito Candelario, William García Duval: Oficlales constitucionalistas.
José Saleta: Soporte y coordinador de la Resistencia en Santiago

viernes, 13 de abril de 2012

Caida de Caamaño

http://reportajesdepolitica.blogspot.com/search?updated-min=2009-01-01T00:00:00-08:00&updated-max=2010-01-01T00:00:00-08:00&max-results=11 lunes, febrero 16, 2009Apuntes de Ocoa Etapa superior del Constitucionalismo Reportaje inéditoPor Moisés IturbidesCorresponsal en Ocoa de los diarios dominicanos durante la guerrilla de Caamaño 1973 A las seis y media de la mañana del día 16 de febrero de 1973, Cruz Santana, entonces un adolescente que administraba el Hotel Marién, donde nos hospedábamos en Ocoa, subió a la habitación para darnos un mensaje del Padre Luís Queen, párroco de la ciudad.Según el informe suministrado al cura por uno de los campesinos de su equipo de trabajo social, los guerrilleros comandados por Caamaño habían atacado la noche anterior (15 de febrero) a las tropas acantonadas en Nizaíto en la penillanura donde antes había funcionado la maderera de Don José Delio Guzmán.Según el campesino informante desde el momento que los guerrilleros atacaron un camión militar que resultó cargado de Chivos para el consumo de las tropas, los acantonados allí al mando del mayor Solano Hernández iniciaron la persecución de los guerrilleros estableciendo el primer combate a las cinco de la mañana dijo el campesino informante.Mientras Carlos Acevedo, fotógrafo del diario El Sol que me acompañaba tratando de ir a la zona de operaciones, a la entrada de Ocoa logro que un oficial al mando de la rastra que traía al camión le permitiera retratarlo declaran do que estaba cargado de chivos como hemos señalado arriba. El vehiculo presentaba perforaciones en la cama y la cabina que el oficial consideró se trataba del lanzamiento de una o dos granadas no resultando muerto ninguno de los militares.Ese día informé en El Nacional que se había realizado el combate de las cinco de la mañana y uno a las diez de la mañana, Caamaño estaba atrincherado con dos guerrilleros en la hondonada llamada La Nevera, la temperatura era de unos cuatro grados bajo cero Celsior me informó el médico militar Moisés Mella Brador, que luegome confirmó observando su termómetro el general Juan René Bouchamps Javier.En el primer combate cayó Lalane que estaba colocado en orden triangular detrás de Caamaño, en el otro extremo a la izquierda se encontraba Mario Nelson Galán que era el práctico en la Zona porque fue empleado del aserradero deDon José Delio Guzmán como dije antes.El Primero en caer lo fue Lalane en el combate de las cinco de la mañana y el segundo Mario Nelson en el combate de diez, luego Caamaño solo peleó en el tercer combate que se inició a la una dela tarde y se extendió hasta las tres cuando a Caamaño se le terminó el parque y se dispuso a llegar hasta el primer caído para obtenerpertrechos, había cambiado diversas posiciones durante el combate pero esta vez le falló la suerte y chocando con una gran laja cayó boca arriba seriamente golpeado en la espinilla de la pierna derecha donde. Allí fue ultimado por un sargento que le dio el tiro de gracia en la frente, la herida del pecho se la propinó un coronel con la bayoneta, que no fue identificado por mi informante militar, un teniente de apellido Acosta que había estado en el Movimiento Constitucionalista al principio de la guerra de abril de 1965 y que se retiró por enfermedad de su madre y por razones obvias se había reintegrado a su cuartel para facilitarle atención médica a su progenitora.Al efecto el doctor Mella Brador, citado antes me informó que efectivamente la herida de la frente correspondía a una bala de fusil y que había cerrado rápido por la baja temperatura, dijo además que la herida del pecho era corto punzante, el cadáver de Caamaño tenía el pantalón magullado y ensangrentado a mitad de la ante pierna, pedí permiso para levantarle el pantalón y ver la herida, dos soldados me ayudaron y pude comprobar que el hueso estaba hundido.El crimen estriba en que fue ultimado herido, sin municiones y una fuentemilitar presente en el momento me informó que el coronel ordenó dispararle cuando yacía boca arriba impedido de moverse por el choque con la enormepiedra, de todos modos tanto el coronel como el sargento sabían que no disponía de balas porque había dejado de disparar minutos antes y trataba de movilizarse hasta el primer caído porque obviamente tendría más pertrechos.Las tropas que pelearon con Caamaño supuestamente llegaron al sitio en la madruga como refuerzos ya que el comandante del punto de inicio de la persecución de esa noche lo era el mayor Solano Hernández yal momento del ataque del camión el oficial de más alto rango lo era él, como también al día siguiente, 17 de febrero cuando regresé al campamento.- Continuará mañanaPublicadas por Moisés Iturbidesa la/s 0 comentarios Vínculos a esta publicación

martes, febrero 17, 2009Apuntes de Ocoa Etapa superior del Constitucionalismo "II" Por Moisés Iturbides A eso de la cinco de la tarde del 16 de febrero de 1973 el entonces coronel Hernández Beato “El Maco” estacionó su carro frente a la residencia del doctor Read, dentista, cariñosamente llamado por los ocoeños “El Curro” un adolescente se acercó al hotel Marién y me dijo que el coronel me estaba buscando, estaba a unos 50 metros de distancia, ignoro porque no llegó al hotel, nunca lo visitó, el comandaba el helipuerto improvisado para las operaciones antiguerrilla y de tarde en tarde le visitaba puesto que éramos amigos. El Maco me dijo; periodista busque su libreta y su fotógrafo que el jefe de la fuerza lo mandó a buscar, lo espero aquí. De inmediato me dirigí al hotel le dije a José Morillo busca tu cámara el Secretario de las FFAA nos mandó a buscarcon el coronel Hernández Beato, subimos al carro y el alto oficial se dirigió a un helicóptero estacionado en el helipuerto y que piloteaba el coronel Manzano. Arribamos la navey despegamos inmediatamente ya en el aire nos dijo vamos a Nizaíto donde los esperan el contralmirante Jiménez hijo, el general Pérez y Pérez y otros oficiales superiores poco minutos despues la nave se posó al borde de la carretera en Sabana Kely, Nizaíto donde antes estuvo el aserradero de José Delio Guzmán como informamos ayer. Jiménez Hijo caminó hacia nosotros me saludo y me dijo te he mandado a buscar para un asunto desagradable pero he preferido que seas tu porque se que conoces muy bien al coronel Caamaño y como han hecho circular versiones de que no es él quien estaba al frente de la guerrilla y que ha muerto esta tarde… sentí un calor enorme a pesar de que la temperatura era dos grados centígrados bajo 0 Celsior, le di la espalda y mis ojos se llenaron de lágrimas - Comprendo tu dolor y tristeza comentó el general. Luego le di el frente, le mire a la cara y agregué vamos a trabajar, vamos Morillo es nuestro deber como periodistas caminamos unos 25 o 30 pasos hacia donde estaban los Generales Pérez y Bouchamps Javier a más de otros oficiales de menor grado, no estaba el general Ramiro Matos y me dijeron que estaba en Montenegro porque estaba muy afectado de la gripe. A manera de abrir de nuevo el diálogo Jiménez hijo comento: tu reporte de hoy en El Nacional es correcto hubo los tres combates, el camión atacado por la guerrilla la noche anterior no estaba ocupado por militares. Estaba estacionado y mientras las tropas descansaban en el recodo de la curva, se refería al contingente comandado por el mayor Solano Hernández como comenté ayer. Jiménez hijo agregó, Caamaño murió cerca de las tres de la tarde y sostuvo solo el tercer combate, no ofreció muchos detalles al preguntarle si fue interrogado, me contestó escuetamente, “no murió en el combate”, ante esa respuesta le pedí que me mostraran el cadáver, a seguidas le ordenó a un joven capitán que me acompañara ordenándole que diera todas las facilidades de que requiriéramos Morillo y yo para identificarlo. Inicié la revisión del cadáver observando una pequeña y vieja cicatriz que Francis tenía debajo del mentón derecho, luego tome su mano derecha para ver una mancha indeleble que tenía en la uña del dedo mayor de la mano derecha, noté que le habían crecido algunos pelos en su amplia frente calva, la bala presentaba un orificio de entrada sesgado como apunté ayer procedimos ayudado por dos rasos del ejército a levantarle la chaqueta y la camisa en busca de rastros de tortura, buscamos en el pecho el cuello y la espalda, no presentaba señales de golpes o rasguños y dimos por concluida la revisión. Todas las fotos de ese episodio que se han publicado corresponden a El Nacional, el señor Porfirio Thomas del Listín Diario, se apropió del rollo y llamó a Valoy para revelarlo y publicarlo en la edición de la mañana de ese matutino, mañana explicaré como sucedió.- Continuará mañana Publicadas por Moisés Iturbidesa la/s 0 comentarios Vínculos a esta publicación

miércoles, febrero 18, 2009Apuntes de Ocoa Etapa superior del Constitucionalismo “III” Por Moisés Iturbides A las seis y media de la tarde del citado día 16 de febrero de 1973, Jiménez Hijo ordenó partir a la ciudad y me dijo: te vas con nosotros y te regresamos mañana luego que termines tu trabajo, caminamos hacia el helicóptero y le ordenó al mayor manzano preparar la partida, en la montaña a esa hora no oscurece, abordamos primero el contralmirante y yo pero al subir el general Pérez los indicadores de la nave marcaron sobre peso y alguien debía bajar. Lo hizo Jiménez hijo invitándome a seguirlo se acercó al entonces mayor Pou y le dijo: háblate con Solano para que te refuerce la escolta y llévate a Moisés para que haga el trabajo y lo regresemos mañana y le ratificó la orden anterior para que una patrulla de oficiales llevara a José Morillo el fotoreportero al hotel en Ocoa, este me había entregado el rollo fotográfico con las imágenes de Caamaño muerto para llevarlo al nacional. Los generales partieron en el helicóptero y nosotros quedamos a la espera de dos oficiales adicionales que nos acompañarían a la capital, Santo Domingo en el carro de Secretario de la FFAA que en ese tiempo era la placa número tres del Estado Dominicano. Eran ya las siete, la noche había terminado de caer y mientras esperábamos que finalizara el relevo de los servicios y la inspección correspondiente, se escucharon unos disparos, Pou ordenó tirarse al suelo y me llamó la atención enérgicamente por quitarme el poncho que había ordenado el general Pérez para protegerme del frío y disimular el color crema de mi camisa. Pou se rodó hasta mi lado en la grama y me dijo no se aparte de mi recuerde que el comandante de la fuerza me encomendó protegerlo. Entonces le comenté, pude percibir disparos de diferentes armas y me contestó con cierta ironía –Si ya me dijeron que eres un experto en combates- No tanto le comenté pero tengo algunos conocimientos –Si sonaron disparos de diferentes armas –Será un intercambio con los guerrilleros agregué –No lo puedo asegurar contestó, también puede ocurrir que algunas patrullas se confundan y se disparen entre si y eso parece porque ya no hay disparos, fue solo un par de ráfagas.El mayor Solano Hernández paso a la velocidad de un rayo en un Jep con las luces apagadas, aún no puedo explicarme como veía la carretera; seguido de tropas de a pie avanzó hacia el lugar donde se suponía ocurrieron los disparos. Al poco rato regresó y se paró para informarle a Pou que un recluta dejó una lata de Sardinas vacía luego de la cena a orillas de la carretera, que al parecer los restantes guerrilleros la pisaron o patearon y el recluta al escuchar el sonido de la lata disparó en esa dirección sin avistar objetivo alguno y que los presuntos guerrilleros le contestaron y se descolgaron hacia la barranca su de la carretera. Al preguntar como sabían que los guerrilleros contestaron el fuego me contestaron que se había hecho contacto con el punto inmediato despues del recluta y no reportó disparos desde su área. Las cosas empiezan a complicarse para nosotros: El comandante Solano ordena que esperemos un rato hasta que se termine una inspección del trayecto que había ordenado a partir de unos 200 metros de donde estamos y hasta una longitud de 400 o 500 metros Pou nos explica y comenta que si fueron los guerrilleros que dispararon no podrán estar más lejos de esa distancia, en eso nos dieron las nueve de la noche cuando un oficial nos informó que podíamos partir, me colocaron en el asiento de atrás entre dos capitanes del ejército Pou ocupó el asiento delantero y el otro capitán iba al volante. Iniciamos la marcha y a unos 225 metros según el marca milla del auto se produjo un poderoso estruendo y algo impactó el pesado auto oficial con tanta fuerza que casi lo atraviesa en la carretera. Pou ordenó evacuarlo por el costado derecho, ordenando no disparar a menos que nuestras vidas peligraran, cuando él mismo inició la revisión del auto para comprobar el impacto uno de los oficiales dijo aquí hay un fuerte olor de gasolina, periodista no se mueva, capitán acompáñelo ahí, estábamos acorados en el guardalodos delantero, Pou y el chofer se fueron a la parte trasera mientras el otro capitán les cubría la retaguardia rápidamente encontraron el problema: un fragmento de granada o una astilla de la laja azul de la zona había perforado el tanque de la gasolina, el chofer estimo que había perdido la mitad del combustible pero agregó que todo el trayecto que nos quedaba unos 25 o 30 quilómetros hasta Vallejuelo, Constanza era en bajada y podíamos hacerlo con el motor apagado Eran cerca de las 10 cuando partimos llegamos a Vallejuelo a eso de las 12 de la media noche, allí estaba con su tropa acampado el coronel García Tejada, Pou lo despertó y le pidió prestado su auto pero el mismo estaba en la capital dijo, entonces salieron y se dirigieron a una pequeña bodega que solo tenía de comer un pan duro y salami santiago, el coronel ordenó que nos lo despacharan y un litro de mac’alber para que nos calentáramos, luego le dijo al bodeguero que llamara el muchacho para que fuera con su chofer en el Jep a traerle el mecánico. Quince o veinte minutos despues estaba el mecánico con nosotros el capitán conductor le explicó y éste se dirigió a la bodega y regresó con una pasta de jabón Lavador y un poco de ceniza, en un balde fue machacando el jabón y mezclando con la ceniza y humedeciendo con el mac’alber, luego lo adhirió al tanque roto lo secó con una llama leve de acetileno y dijo en 15 o veinte minutos estará duro y pueden irse y así fue. A las cuatro de la maña llegamos a la capital antes que nada fuimos al Palacio Nacional, cede del gobierno y de la secretaría de las FFAA a cambiar el carro accidentado todo lo que se encontró fue un Jep y en el nos movilizamos, cuando llegamos a El Nacional, estaba cerrado y Pou se bajo del Jep y llamó al vigilante, nadie respondió, habían cuatro ciudadanos vestidos de civil con aspecto militar, dos al frente y dos contra la verja del diario y Pou entendió que era mejor marcharnos, fuimos a El Sol estaba cerrado y no había vigilante tampoco, nos dirigimos a El caribe y estaba cerrado el vigilante dijo que no podía pernoctar allí entonces nos fuimos al Lístín Diario allí estaba Don Porfirio Thomas, jefe de producción del rotativo, Pou le dijo que deseaba que yo acabara de pasar la noche allí a modo de protegerme y le dijo que no era posible, le pedí a Pou entonces que me llevara a casa en San Carlos y encontramos tres sospechosos apostados dos en la esquina Salcedo con Abreu y otro recostado al poste de luz frente al teatro San Carlos le dije que me dejara en la secretaría militar, pero ahí, de noche cuando no estaba el secretariou otro alto oficial no había vigilancia y un cuartel no eraapropiado según él, entonces optó por dejarle el rollo de las fotos tomadas por morillo, el señor Thomas llamó a Valoy que las reveló, firmó y publicaron en la edición de ese día 17, en el acto de pillaje periodístico más vil que haya conocido. No pude ver al doctor Morillo para explicarle y Freddy Gatón (fenecido) no quiso escucharme, dijo que ese muerto no era Caamaño y que todo era puro cuento.- ContinuaráPublicadas por Moisés Iturbidesa la/s 0 comentarios Vínculos a esta publicación

jueves, 12 de abril de 2012

La guerra sucia


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Abril 2012, 12:11 PM
La guerra sucia
Escrito por: Chiqui Vicioso (luisavicioso@hotmail.com)
Extraño país el nuestro, que permite que un intelectual menor de otro país
llegue y denueste a sus ciudadanos, como si estos no tuvieran familia. Es lo
que acaba de suceder con Piero Gleijeses, un malhumorado y rencoroso intelectual
que vino en plena guerra de 1965 a entrevistar a jóvenes enfrascados en una
guerra muy desigual, para escribir su libro sobre la gesta de abril.
Precedido de una dudosa reputación, fue recibido con recelo por varios de los
dirigentes principales de la gesta, entre ellos Fidelio Despradel, y 47 años
después regresa a destilar su rencor de contrariado pequeñoburgués.
Nada importante si no fuera porque regresa cuando despega Alianza País
(¿coincidencia?), una fuerza a la que Fidelio ha dedicado los últimos años de su
vida y de la cual soy candidata.
Es el inicio de la guerra sucia, instigada por un viejo dirigente, hombre
contradictorio y vacilante, cuyo nombre no revelo por consideración a su
familia. Es la guerra sucia de la envidia que ha corroído desde siempre a
ciertos sectores de la "izquierda dominicana", incapaz de articular una solución
creativa y gramsciana a la crisis generalizada del país.
Mis guerras, como se sabe, han sido literarias: contra la misoginia, el
elitismo, la exclusión y la supuesta apoliticidad de que alardean muchos
literatos. No tengo armas para esta guerra sucia, a ahora que di un paso al
frente para apoyar la decencia en la política y el predominio de las ideas.
Hago responsables de lo que nos pueda suceder a quienes intentaron, trayendo
a Gleijeses, manchar nuestro esfuerzo enjuiciando la trayectoria de uno de los
más nobles dirigentes políticos dominicanos.
Hago responsables de lo que nos pueda suceder a quienes presentan a Manolo
Tavárez Justo como un líder pusilánime acorralado por un grupo de jóvenes que
podían ser sus hijos o hermanos menores, y no como un hombre que cumplió con la
palabra empeñada cuando dijo "sabemos dónde están las escarpadas montañas de
Quisqueya".
Hago responsables de lo que nos pueda suceder a quienes en pasadías con
puercos y cerveza han planificado y anunciado el asesinato de Fidelio, por su
firmeza irrenunciable y sus denuncias de las claudicaciones de quienes aceptan
dinero de los mismos que masacraron nuestras luchas.
Y a ustedes, solo les pido que no se dejen confundir y confíen en nosotros.
Paz y bien.

domingo, 8 de abril de 2012

Debate sobre Los Palmeros, 40 años después


12 de Enero del 2012

Aniquilados por policías

Debate sobre Los Palmeros, 40 años después

Moncho Henríquez: Amaury era más preparado militarmente que Caamaño




Amaury Germán Aristy tenía más preparación militar que el coronel Francisco Alberto Caamaño Deñó, dijo en El Gobierno de la Mañana de la Z101 el coronel Ramón Henríquez (El Coyote), jefe del Servicio Secreto de la Policía a principios de los setenta.

En el aniquilamiento del grupo Los Palmeros que lideró Amaury Germán Aristy, participaron tropas policiales y estuvieron presentes miembros de la Agencia Central de Inteligencia (CIA, Siglas en Inglés), afirmó.

“Los únicos extranjeros que participaron fueron los de la CIA que estaban en el Departamento Nacional de Investigaciones (DNI)”, afirmó.

"Llegamos a la cueva poco después de las 6:00 de la tarde del día 10 de enero”, subrayó.

Agregó que previamente el Servicio Secreto implementó un operativo denominado “ABC”, con el objetivo de ubicar el paradero de Los Palmeros.

Relató que a los 43 días le siguieron los pasos a César Féliz, quien adquiría alimentos y le hacía diligencias a los guerrilleros.

“César Féliz hizo una compra en un establecimiento de unos chinos de la avenida San Martín, luego hizo otra en un supermercado de la avenida España y una tercera compra frente al puente Duarte”, manifestó.

“Se le dio seguimiento hasta llegar al kilómetro 14 ½ de la autopista Las Américas”, puntualizó.

Agregó que “fuimos en dos carros, arrestamos a Féliz, la casa estaba vacía. Amanecimos allí”, señaló.

Añadió que alrededor de las 5:00 de la madrugada llegaron tropas de Operaciones Especiales de la Policía.


“Salieron La Chuta y Cerón, quienes murieron en un primer enfrentamiento, quedando en la cueva Amaury y Virgilio Perdomo”, subrayó.


Reveló que extrajo de un bolsillo del pantalón de Germán Aristy el programa de Los Palmeros, que posteriormente se lo entregó al presidente Joaquín Balaguer.


Henríquez dijo que Los Palmeros salieron de Cuba hacia Praga y luego a Santo Domingo. Agregó que se ocultaron en un apartamento de la calle Santomé esquina avenida Mella, de donde salieron hacia la casa en la autopista Las Américas.


En la cueva estaban Amaury Germán Aristy, Bienvenido Leal Prandy (La Chuta), Ulises Cerón Polanco y Virgilio Perdomo.


Respecto a la cantidad de militares que estuvieron en el área, Henríquez estima que cerca de la cueva habían alrededor de 700, pero que no podía precisar los que se encontraban en Las Américas.


“Miguel Cocco era quien más influía en Amaury, era como su padre”, expresó. Añadió que Cocco le entregó a Amaury el dinero de los asaltos a un banco de Puerto Rico y una sucursal del Royal Bank of Canada de la capital.

Por: Augusto Socías

Participante en combates asegura dos miembros de Los Palmeros murieron fusilados

http://z101digital.com/app/article.aspx?id=56839

Participante en combates asegura dos miembros de Los Palmeros murieron fusilados
Enviado: 4 de abr de 2012 8:31 PM



12 de Enero del 2012
Debate en la Z101

Participante en combates asegura dos miembros de Los Palmeros murieron fusilados Leal Prandy (La Chuta) y Cerón Polanco habían sido agarrados vivos fuera de la cueva Un ex miembro del departamento de operaciones especiales de la Policía que participó en los combates que sostuvieron los organismos de seguridad del Estado con el grupo Los Palmeros en enero de 1972, aseguró hoy que Bienvenido Leal Prandy (La Chuta) y Ulises Cerón Polanco fueron fusilados tras ser capturados por un raso de la institución del orden.
José Bienvenido García Martínez afirmó en El Gobierno de la Mañana de la Z101 que Leal Prandy (La Chuta) y Cerón Polanco habían sido agarrados vivos fuera de la cueva, donde estuvieron atrincherados, por un raso del Departamento de la Policía de la Fortaleza Ozama y luego fueron fusilados. El aniquilamiento de Los Palmeros ocurrió el 12 de enero de 1972 próximo al kilómetro 14/2 de la autopista Las Américas.
Según el testimonio de García Martínez, el combate siguió con Amaury Germán Aristy y Virgilio Perdomo, “en el cual nos mataron siete miembros del departamento de Operaciones Especiales”, dijo.
García Martínez indicó que entró a la cueva y sacó vivo a Virgilio Perdomo y que Amaury Germán Aristy ya estaba muerto. Dijo que cuando pidió auxilio para que le ayudaran a sacar a Perdomo fueron unos guardias que iban con el mayor Benoit Liriano y fueron al bolsillo del hombre para ver que cargaba.
Manifestó además que a Perdomo lo mató un teniente coronel de la segunda brigada, de quien no ofreció su nombre, pero dijo que era un hombre pequeño y gordo.
En el debate que se desarrolló hoy en El Gobierno de la Mañana de la Z101, García Martínez manifestó que después de Perdomo estar muerto, “vino el señor Rodríguez Ortiz y le dio un rafagazo en la cabeza a Perdomo ya estando muerto”.
García Martínez indicó que está dipuesto a debatir y defender su versión con cualquier otra persona que tenga una información diferente.
Por: Redacción
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http://unojotacuatro.blogspot.com