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lunes 14 de junio de 2010
El 14 de Junio Hoy
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Nuestro núcleo ha estado argumentando que los movimientos rápidos y violentos escenificados por el proletariado en el nivel internacional muestran las características de sus luchas, saliendo de un periodo contrarrevolucionario largo impuesto por la social democracia, específicamente su estructura de "izquierda" liderada por los bolcheviques, durante el periodo 1917-1923. Toda la historia revolucionaria de las minorías de la época ha sido magistralmente ocultada por esas estructuras que ustedes conocen como de izquierda, marxistas, leninistas, y un largo y maldito etcétera. Y que ante esta situación el trabajo del Partido de las minorías "tiende a dirigir, centralizar, explicar teóricamente, el movimiento real del proletariado" (ver Notas sobre el Estado en Comunismo # ? ). En efecto, explicamos que el surgimiento del grupo "vota por ninguno" se inscribe en ese contexto en los intentos que están haciendo nuestros hermanos de clase por sacudirse de la política social democrática que lo ha dominado durante los últimos 87 años. Hay otras expresiones que deben ser centralizadas para responder al deterioro social generado por el capital.
En ese contexto, observamos la continuidad orgánica de la política social demócrata en las estructuras del 14 de Junio, por ejemplo, nos damos cuenta de la esencia profundamente contrarrevolucionaria de esas estructuras, ambas la que se creo antes de la derrota del 1959 y la igualmente derrotada de 1960, desde que "todo movimiento de la historia es el acto de nacimiento de su ser empírico, y de conciencia pensante", es decir que la canalización de las luchas del proletariado hacia esas estructuras constituyo una negación de nuestra clase, en otras palabras, del Partido. Por eso nosotros separamos las luchas del proletariado por mejorar sus condiciones de vida de los esfuerzos del reformismo armado por canalizar esas luchas para liquidarlas con la maquina de dominación de clase. Esas intenciones se verifican en su programa “revolucionario” para reformar la sociedad y su Estado.
Durante la vida de la Asociación Internacional de Trabajadores o Primera Internacional, Marx fue uno de los responsables de la formación teórica de sus miembros. En una de sus intervenciones teóricas corrigió las prácticas obreras que se limitaban a reivindicar una reducción de la jornada de trabajo; y dijo que debían inscribir en sus banderas: Por la abolición del trabajo asalariado! Para cuando surgen las estructuras del 14 de junio ya existen esa y otras expresiones redactadas en el primer Manifiesto del Partido Comunista de 1848. Pero mucho antes de que apareciera ese documento histórico, los grupos que lideraba Flora Tristan las usaban e inclusive utilizaban el concepto "dictadura de los pobres". No se constata, en los documentos de nuestros hermanos de clase, ninguna propuesta por reformar el sistema. Aunque las corrientes reformistas ya existían en la Comuna de 1871. Es de esas corrientes políticas que los bolcheviques y otras estructuras a la izquierda del capital, registradas en la bibliografía burguesa como “comunistas” heredan su política social democrática, por ejemplo el 1j4 lucha por una reforma agraria profunda!
Romper con toda la tradición reformista del Movimiento 14 de junio implica retomar las luchas por instaurar la dictadura social del proletariado para la abolición del trabajo asalariado como primer paso para liquidar la tradición e influencia democrática en el movimiento socialista, lo cual lo ha corrompido en el reino de la teoría y la acción. Entonces una de nuestras tareas es remover de la cabeza de la masa proletaria esa tradición reformista, divulgada por todo el planeta con mucha fuerza a raíz de la derrota de la ola de acción proletaria internacional de 1917-1923 por Lenin y Trotsky (y sus seguidores) desde 1920, quienes tomaron partido a favor del “parlamentarismo revolucionario”, con el objetivo de cambiar el rumbo de esa vía histórica.
La estrategia militar del 1j4 es una copia del método utilizado por la contrarrevolución en China y Viet Nam y en el Caribe Latinoamericano por los reformistas cubanos liderados por Fidel Castro. Romper con toda esa mierda requiere retomar la estrategia comunista diseñada por los comuneros de Paris. El ataque “cívico-militar” que el proletariado llevó a efecto el 18 de Marzo de 1871 en Francia fue exitoso porque nuestros hermanos de clase sorprendieron a las fuerzas de la burguesía, arrebatándole el cañón a la Guardia Nacional, iniciativa que fue seguida por la acción directa de los proletarios en uniforme, quienes se negaron a disparar contra sus hermanos de clase insurrectos, en cambio empuñaron sus armas y dispararon a sus oficiales. El acontecimiento rápido y violento fue repelido días después porque el proletariado en armas se dejó desviar hacia la celebración de elecciones, permitiendo espacio y tiempo a la clase capitalista para re-organizar sus fuerzas y lanzar la contra-ofensiva y ganar la guerra.
El 1j4, igual que todas las estructuras a la izquierda del capital, tiene una esencia contrarrevolucionaria y entonces son portadoras de la intención implícita de canalizar las luchas del proletariado por mejorar sus condiciones de vida por el camino que conduce a la reforma. Esas intenciones se verifican en sus programas, por ejemplo, dijimos que 14 de Junio luchaba por una reforma agraria profunda.
Más todavía, en algunos momentos electorales esas estructuras han asumido el abstencionismo comunista como una cuestión “táctica”. Sin embargo, las tesis acerca del abstencionismo comunista redactadas por Amadeo Bordiga, en torno a las que la minoría comunista se agrupo en el seno de la Tercera Internacional, son esencialmente anti-capitalista, contra la sociedad y la maquina del dominación de clase. Los procesos electorales son entendidos como un ataque contra la revolución proletaria. Por eso las minorías revolucionarias rechazamos categóricamente la participación del proletariado en cualquier proceso electoral, porque además de desviar sus luchas cotidianas contra el capital crea la idea falsa de la posibilidad de conquistar el poder con una mayoría en el Congreso, negando la conquista y destrucción del mismo a través de la lucha armada revolucionaria. Como dice la tesis No. 2: “…la conquista del poder político por el proletariado, lo cual es el punto de arranque del trabajo de construcción económica comunista, implica la supresión violenta e inmediata de los órganos democráticos, que serán reemplazados por los órganos de poder proletarios, los consejos obreros. Con la clase explotadora así desprovista de todos sus derechos políticos, la dictadura del proletariado, es decir un sistema de representación y gobierno de clase, será realizado. La supresión del electoralismo es entonces un objetivo histórico del movimiento comunista; todavía mas, es precisamente la democracia representativa la cual es la primera forma de sociedad burguesa que tiene que ser derrocada, propiedad capitalista, aun antes que la máquina burocrática y gubernamental del Estado”. (Amadeo Bordiga)
Sin embargo, el programa adoptado por el Movimiento 14 de Junio plantea “respaldar el ejercicio continental de la democracia representativa…” (Se entiende entonces que la consigna elaborada desde 1996 por el PACOREDO, “vota por ninguno”, como “una forma de ejercer el derecho del sufragio en contra de todos los candidatos de los distintos partidos”, era y es una consigna contra-revolucionaria”.) En efecto, todos los planteamientos de las estructuras a la izquierda del capital son una negación absoluta del comunismo.
Las concepciones que normaban la practica del reformismo armado, primero a través del Movimiento de Liberación Dominicana de 1959, de donde el 1j4 acoge el “Programa Mínimo”, responden inadecuadamente a la dictadura del capital, las formas y defectos que surgen de sus contradicciones y antagonismos. Por ejemplo, en vez de plantear la transformación radical de la sociedad y el Estado capitalista, su estructura económica y aparato militar, asumen “derrocar por todos los medios a su alcance el régimen de opresión y sangre establecido en la Republica Dominicana por Rafael L. Trujillo desde el año 1930”. De esa manera desvían las energías y acciones proletarias por el camino que conduce a la reforma de la sociedad y el Estado.
También es inadecuada su respuesta al primer gobierno electo del partido “revolucionario” dominicano, liderado por Juan Bosch en 1963; y mas errática no pudo ser su respuesta a las contradicciones y antagonismos que produjeron la guerra capitalista de abril de 1965. Mas todavía, la política reformista del 1j4 es reproducida aun después de su división en el Partido “Comunista” de la Republica Dominicana, liderado por Pin Montas, “quien era jefe de la Juventud del Catorce de Junio”, para solo citar una de esas estructuras a la izquierda del capital que son calificadas por todos los historiadores burgueses como “comunistas”. El capital mundial, a través de la CIA, estableció “un puente de contacto efectivo en la resistencia interna de los grupos que conspiraban contra Trujillo”, para impulsar el terrorismo de Estado contra la fracción militar trujillista que monopolizaba el producto de las relaciones de producción de la estructura económica y dominaba el aparato militar del modo de producción capitalista, el cual no sufrió ninguna modificación substancial con la destrucción de la competencia trujillista.
Lo importante, para la nueva generación de proletarios que está saliendo del largo y contrarrevolucionario periodo impuesto en América Latina y el Caribe por la social democracia, específicamente desde Cuba por su burguesía disfrazada de “revolucionaria”, es rechazar enteramente el programa del Movimiento 14 de Junio por reformista y, asumir la herencia de las luchas cotidiana del proletariado de la época por mejorar sus condiciones de vida como parte esencial del Programa Revolucionario hoy.
¡Abajo el gobierno!
¡Con un ataque proletario rápido y violento contra los pilares de la burguesía!
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