Vistas de página en total
domingo, 6 de junio de 2010
“En mi época los jóvenes no podían resistir la tiranía”
RECUERDOS
“En mi época los jóvenes no podían resistir la tiranía”
DULCE TEJADA ENTENDÍA LAS MATEMÁTICAS, PERO NO LA HISTORIA, HASTA QUE SU AMIGA MINERVA SE LA NOVELABA Y LE ENSEÑÓ A APRENDERLA COMO ALGO QUE SERVIRÍA PARA TODA LA VIDA
Amistad. El actor Charlston Heston, a la izquierda, compartiendo con Dulce Tejada Gómez y su esposo Luis Antonio Álvarez, en una foto de archivo familiar.
Noticias Relacionadas
Fabricaba bombas para que se respetara la vida
Wendy Santana
wendy.santana@listinidiario.com
Santo Domingo
Violar la regla de su casa de ponerse a hablar con los varones a los 15 años ayudó a Dulce Tejada a darse cuenta de que no era sólo ella la que veía que los jóvenes estaban siendo oprimidos y coartados del accionar público.
En el parque de San Francisco de Macorís compartía con los muchachos más avanzados de su época, entre ellos Marino Vinicio Castillo (Vincho) y otro abogado llamado Abelito Fernández, con quienes trataba diversos temas, entre ellos de política, gobernabilidad y democracia.
“Teníamos 15 y 16 años y algunos hablaban de Trujillo y de los abusos que él cometía. Un día mataron a uno de esos muchachos, vilmente, y nos indignamos porque era muy amigo de nosotros, pero toda su familia estaba opuesta al régimen y los mataron casi a todos”.
“Una de mis expresiones en las reuniones era: recuerden que estamos en una carretera con una piedra en el camino y hasta que no la quitemos no se puede pensar en más nada”.”
Dulce Tejada, luchadora antitrujillista
Cuenta Dulce que ya graduada de ingeniería le era muy difícil conseguir trabajo y de los pocos contratos que tenía debía darle el 10% a Trujillo. Tampoco se podía hacer muchos negocios porque la gente del gobierno los vigilaba todos y la mayoría los bloqueaba, recuerda.
Aquella forma de actuar del régimen fue enfureciendo a todo el país “como un pulpo quiere arroparlo todo con sus múltiples brazos”, asegura la heroína. Esta descripción del panorama de entonces la llevan a afi rmar que la fuerte oposición que se le hizo al gobierno dictatorial no provino de un movimiento específi co ni que hubo un líder o dos que formaron la célula.
Cada quien con cada cual
A su entender, todos los jóvenes de aquel momento crearon de manera particular su propia célula, que cuando se juntaban era como la grafi cación química de moléculas compuestas por numerosos átomos.
Dulce analiza que prácticamente el país entero inició un plan de lucha por distintos lados. Destaca que había muchos pueblos que no se comunicaban entre sí y mucha gente que no se conocía ni sabía los planes del otro porque cada grupo se iba creando independiente.
Cita que los grupos coincidieron en la lucha porque Rafael Trujillo tenía el mismo sistema de opresión en todos lados, y la gente sufría inmensamente los abusos.
Tejada aclara que no pretende quitarles a los dominicanos la admiración que sienten por Manolo Tavárez Justo y Minerva Mirabal, señalándolos como líderes y forjadores del Movimiento 14 de Junio de 1959, pero aclara que las nuevas generaciones deben saber las cosas exactamente como fueron.
Esta mujer luchadora y opositora al régimen trujillista explica que cuando vino la expedición del 14 de junio de 1959, ya en el país existían grupos moleculares internos que trabajaban para quitarle la corona al tirano, y que el hecho de que posteriormente le pusieran un nombre no signifi ca que todos los luchadores hayan salido del movimiento.
“Realmente no hubo una cabeza, sino varias, muchísimas; en cada pueblo había varias cabezas. Tal vez por eso la lucha no tuvo el éxito inmediato esperado, porque todo el mundo actuaba por su lado y nadie se quería someter a los requerimientos del otro porque cada quien se formó solo y tenía su propia estrategia de trabajo”.
También dice esta luchadora macorisana que las hermanas Mirabal tuvieron una importancia determinante porque Minerva Mirabal, la líder de su casa y de muchos demócratas, siempre se mantuvo fi rme tras un ideal patriótico, que era salvar la Patria, y no le interesaba ninguna gloria ni posición política.
Su relación con Minerva fue muy especial porque cuando estaban en el colegio, Mirabal le enseñó a estudiar la historia, porque le era muy difícil memorizarla y ella le decía que eso le serviría para toda la vida.
Sentimiento patriótico
La tesis de doña Dulce Tejada, que ya tiene 80 años, es que en vez de comenzar un movimiento a expandirse, como se cree, la realidad fue que en la medida en que el régimen fue empeorando fue creciendo en toda la gente un sentimiento patriótico que cuando se juntó en la cárcel tomó forma del movimiento que hoy se conoce como el 14 de Junio.
La prueba de que todo el mundo formaba un núcleo para contribuir al derrocamiento del tirano era que en los grupos opositores había personas muy mayores que mucha gente no supo que estaba ahí. Cita a una tía que tenía 80 años en ese entonces y aportaba las pocas fuerzas que le quedaban para que sus nietos no padecieran lo que ella estaba viviendo.
“Yo tengo 80 años ahora y me doy cuenta que uno a los ochenta años aunque no pueda coger cosas muy pesadas, sí puede usar la cabeza”.
--
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.